¿NOS QUITAMOS EL SOMBRERO?

Buenas amigos,

Este es el primer post que escribo desde hace más de un año, un año muy largo en el cual he podido escribir y simplemente no he tenido la suficiente inspiración para ello.
Tristemente, la situación actual me ha dado tiempo a pensar y leer mucho acerca de varios temas ambientales. Y uno de ellos es el que vamos a tratar en el día de hoy.

Llevamos desde mediados de marzo en una situación de confinamiento y de paralización de parte de la actividad industrial, sobretodo la actividad no esencial. Esto hace que las emisiones totales de CO2 hayan bajado a mínimos históricos, pero eso es solo las emisiones no es la acumulación.

De echo, la acumulación actual va a llegar al máximo histórico de 417 ppm un hecho que queda muy distante de los objetivos marcados por los ODS, la agenda 2030 y la Estrategia Europea de Energía y Clima para lograr que la temperatura no suba de los 2 ºC.

Unos pocos datos no ayudarán a entender por qué esta situación ayuda para la calidad del aire, pero no tendrá un impacto significativo en la lucha contra el cambio climático.

En un artículo reciente publicado, se dice que las emisiones se redujeron en China, de manera estimada, un 25% pero en contrapartida según el Global Monitoring Laboratory de la NOAA, ha registrado un incremento de 3 ppm (411.97 -> 414.50) en el mes de marzo de 2020 con respecto a marzo de 2019.

*Cuadro 1. Fuente NOAA.

   
Y, ¿hasta dónde quiero llegar con estos datos? pues que esta hibernación en la producción y paro económico sirve (y es necesario) para la mejora de la calidad del aire urbano, probablemente muchos de nosotros no hayamos visto el skyline de nuestras ciudades como ahora si no era en un día lluvioso. La reducción de concentración de NOx en los centros urbanos (la famosa boina formada por el smog) se ha visto reducida a mínimos.

Pero, en realidad, la cuestión del cambio climático es mucho más profunda y va mucho más allá de un parón de un par de meses en el modelo productivo actual. Como se ha podido ver en la gráfica anterior la concentración de CO2 sigue aumentando los últimos meses debido a que este es un factor acumulativo, puesto que su vida en la atmósfera no se limita a unos pocos meses.

Es por ello que es necesario hacer un reset en nuestro modelo productivo y en nuestra capacidad de consumo, no se trata solamente de reciclar todo el plástico que consumamos o de separar en casa la basura para depositar en los contenedores. Se trata de un cambio de paradigma global y necesario, un cambio en el que el consumo responsable sea premisa indispensable, redirigir el modelo de producción a un modelo circular en el que se considere la vida de un producto no solamente como un elemento que se pueda reciclar y volver a poner en circulación, sino un modelo en el que las industrias productoras lleven aparejadas líneas de reparación donde los productos que vendan puedan ser reparados y reutilizados por sus dueños. Habría una línea nueva de negocio, un nuevo tipo de economía y una reducción de uso de recursos primarios, dotando de la debida importancia a los recursos secundarios (aquellos que ya han sido utilizados y que necesiten de una reparación para continuar con su vida).
Sobre este tema hay un post muy interesante en el blog ecopixeladas sobre la obsolescencia programada y la reparación de objetos y utensilios.

Volviendo al tema, no hay que confundir las noticias que nos hablan de bajada de emisiones con la mejora de la situación climática, porque estos días he podido leer muchos comentarios en twitter e incluso en mi entorno laboral sobre que esta situación nos va a beneficiar para luchar contra el cambio climático.
Sin duda que todo lo que sea reducción de las emisiones es un granito de arena que podemos aportar para mitigar la acción del cambio climático, pero como ya he comentado dos meses de paralización no bastan para reconducir la situación. Es un cambio que se tiene que llevar a cabo desde abajo, desde la persona individual y las familias, siguiendo por las grandes empresas que utilizan recursos fósiles para su producción y todo ello redirigirlo hacia un modelo de producción diferente y sostenible.
Para ello, en Europa se está hablando del Pacto Verde Europeo, que velará para que la salida de la crisis actual se haga conforme al desarrollo sostenible y a la energía limpia.

A continuación voy a añadir algunos links en los que se puede obtener más información acerca de este tema tan interesante y que genera tanta confusión.

En agenda pública, la Ministra para la Transición Ecológica y Reto Demográfico escribió un interesante artículo que comienza hablando sobre el aplazamiento de la COP-26 pero termina con un tema mucho más interesante, no desvelaré el contenido os animo a que vayáis y lo leáis pinchando en este enlace al artículo.

En este otro explican de una manera más científica la reducción de las concentraciones de CO2.

Con estos doy por concluido el post de hoy. Prometo que intentaré actualizar contenido más a menudo y seguir intentando explicar la problemática ambiental para aquellos que no entienden la jerga científica y hacer más llevadero el entendimiento y por qué debemos cambiar nuestros hábitos.

Espero que todos podamos salir pronto de esta situación, mucho ánimo!!!!